Boletín de Prensa
Mérida, Yucatán, 10 de agosto de 2025.- La Confederación de Grandes Logias Regulares de los Estados Unidos Mexicanos, que agrupa a más de 25 mil masones activos en 31 estados del país, realizará mañana el Encuentro Masónico Peninsular 2025 en la ciudad de Mérida, Yucatán.
El evento reunirá a los máximos representantes de las grandes logias de Tabasco, Campeche, Quintana Roo, Belice y Yucatán, con el propósito de fortalecer los lazos fraternales, consolidar la unidad entre los masones regulares y definir estrategias conjuntas de trabajo en beneficio de la masonería y la sociedad.
Encabezado por el Dr. Fernando Martínez Acosta, presidente de la Confederación, el encuentro también reafirmará que la única Gran Logia regular reconocida en Yucatán es la Gran Logia Unida La Oriental Peninsular, presidida legítimamente por el Muy Respetable Gran Maestro Enrique Oropeza Meneses, contralmirante con más de 30 años de vida masónica y 42 años de servicio en la Secretaría de Marina Armada de México.
En entrevista, Martínez Acosta subrayó que la masonería mexicana se rige por principios de fraternidad, respeto a la libertad individual y a la diversidad de creencias, y que trabaja con transparencia, unidad y compromiso social. Asimismo, minimizó la presencia de un pequeño grupo que opera de manera irregular, sin reconocimiento nacional ni internacional, y que busca usurpar el nombre y prestigio de la organización.
Durante su gestión al frente de la Confederación, iniciada en 2021, Martínez Acosta ha impulsado el reconocimiento internacional de la masonería mexicana, integrándola a las Grandes Logias de Norteamérica y a la Conferencia Mundial de Grandes Logias.
El Encuentro Masónico Peninsular 2025 forma parte de las reuniones interlogiales que se realizan cada cuatro meses, y servirá como antesala de la próxima reunión nacional, en la que participarán representantes de las 31 logias que conforman la Confederación.
La masonería, con casi 300 años de historia desde su origen en Inglaterra, promueve el perfeccionamiento espiritual y moral de sus miembros, el servicio a la sociedad y la filantropía discreta, como la que realizan los Shriners en hospitales infantiles especializados.